Cuando me sumergí en esta aventura de escribir un blog, me prometí que siempre contaría historias de mis interacciones, porque así mi musa fluye de manera natural y el contenido de cada escrito lleva mi toque personal. Además me prometí describir con la mayor precisión posible las emociones y sensaciones que me produjeron esas experiencias vividas, para que mis lectores sientan que les estoy hablando cara a cara. Afortunadamente, luego de un año, descubro que continuo cumpliendo esa promesa: Cuento mis historias tal y como ocurren.
Sin embargo, reconozco que con el ajetreo del fin de curso y con mi boda no he podido sentarme a escribir. Más bien no he buscado el momento para hacerlo, porque me encontraba algo desmotivada. Tengo muchas historias en mi libreta pero como no he recibido muchas interacciones, siento que quizás a la gente no le gusta mi blog. Al mismo tiempo, mis ganas de escribir hicieron que pidiera un regalo muy especial para mi cumple (os lo cuento al detalle en otra historia) que me facilitará la transcripción de mis cuentos.
Entre la desmotivación y mis ganas de escribir, me llegó un correo avisándome de dos nuevos comentarios en mi blog. Por supuesto, lo primero que pensé es que serían de alguien conocido. Menuda sorpresa al abrir el correo porque los comentarios son de una madre que me encontró por casualidad brujuleando en internet. Evidentemente me emocioné muchísimo, pero las lágrimas me saltaron al leer las cosas tan bonitas que me escribió.
Luego de releer los comentarios unas cuantas veces, me puse la reproducción aleatoria “Mi mix” que me sugirió YouTube, para responderlos. Comenzó a sonar una canción de ZAZ que no conocía, así que activé los subtítulos en español y fue como un soundtrack (ver video) buscado para este momento. Respondí los comentarios y acto seguido empecé a escribir J’ai promis. Mis manos parecían las de una mecanógrafa profesional porque necesitaba contaros lo ocurrido con las sensaciones frescas y así recordaros que siempre hay un paso más por dar hacia adelante; ¡¡¡que siempre hay razones para ponerle ilusión y muchas ganas a todo lo que hacemos!!!
Con todas estas sensaciones bonitas, me siento muy animada a escribir; así que voy a dedicar los meses de julio y agosto para recolectar y transcribir nuevas historias; organizarlas y contároslas a partir de septiembre.
¡¡A disfrutar del verano!! ¡¡A disfrutar de cada nuevo día!!
Historia escrita en el año 2017
AdrIsa 😘